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LLAMAS DE GLORIA

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«Un poco más y me convences a hacerme cristiano», le dijo Agripa (Hechos 26: 28).

Oye, si te has saltado algún fragmento del libro de Hechos, por favor no pases por alto los capítulos 25 al 28. Estas son algunas de las razones para que no te pierdas alguno de estos capítulos:

En Hechos 24, Pablo es juzgado debido a su fe en el tribunal de Félix. Si no sabes quién es Félix, déjame darte una idea. Era un viejo vil y pervertido, ¿Qué hizo para ganarse esa reputación? Bueno, usó a un hechicero llamado Simón para convencer a una bella princesa llamada Drusila, de que abandonara a su marido y se casara con Félix. Ambos quedaron aterrorizados cuando Pablo habló «Sobre la justicia, el dominio propio y el juicio venidero» (vers. 25). Se dieron cuenta de que habían pecado grandemente. Las palabras de Pablo atemorizaron tanto a Félix que le pidió al apóstol que dejara de hablar: «¡Basta por ahora! Puedes retirarte. Cuando sea oportuno te mandaré llamar otra vez».

¡¡¡Sí, claaaaaroooooooooo!!!

Después de dos años, Festo sucedió a Félix (no, no eran hermanos). Los líderes judíos pidieron a Festo que sacara a Pablo de la cárcel y lo pusiera bajo su custodia, ya que lo querían matar. Como Pablo era ciudadano romano, apeló para que pudiera presentar su caso en Roma ante el césar. Festo estuvo de acuerdo, pero decidió pedir consejo a la autoridad superior, el rey Agripa II, que gobernaba el territorio en nombre de Roma. Herodes, su bisabuelo, había sido el que en busca del niño Jesús asesinara bebés inocentes de Belén. Herodes Antipas, su tío abuelo, había asesinado a Juan el Bautista; y su padre, Agripa, presidió el juicio que condenó a muerte al apóstol Santiago. ¿Qué oportunidades de sobrevivir tenía Pablo ante Agripa II?

¿Recuerdas la visión que Dios dio al apóstol en Hechos 23: 11? Quería que Pablo testificara en Roma antes de su muerte, y Pablo todavía no había llegado a la ciudad. Habló tan elocuentemente ante Agripa que casi lo convenció de seguir a Cristo (Hechos 26: 28).

Luego, Pablo fue enviado a Roma para que lo juzgaran ahí ante el emperador.

NO DEJES DE LEER

Hechos 25-28

¿Qué hizo Pablo en Roma? Hechos 28: 30, 31. Más tarde, el emperador Nerón lo mandó matar. Pero antes de su muerte, Pablo testificó valientemente ante el aterrado Emperador.

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