|
Hay bastantes tipos de palmeras en el mundo, y muchas son de utilidad. En Israel encontramos las hermosas palmeras datileras con sus enormes frutos. También se cultivan en California, Estados Unidos. La mayoría de los dátiles que se consumen en ese país crecen allí.
En la República del Perú, en Sudamérica, ciertas palmeras producen otros tipos de frutos. El fruto del aguaje es de forma cilíndrica y mide casi ocho centímetros de largo; su cáscara está escamada. Los peruanos quitan la cáscara con los dientes y comen la pulpa, que tiene menos de un centímetro de grosor. También usan el fruto para elaborar bebidas y helado.
Brasil, también en Sudamérica, tiene probablemente la mayor variedad de palmeras útiles. Está la carnauba de hojas muy grandes como abanicos, que produce cera, la cual, procesada, se usa en automóviles y pisos de madera, así como para pulir algunos muebles. También está la famosa chonta o palmito. La gente corta esta palmera y le extrae el corazón. Este también se corta en trozos o tiras como listones, y se cocina o sirve crudo en ensalada. Es muy sabroso.
De cierta palmera brasileña se obtiene un fruto particular, con el que se prepara un jugo muy nutritivo llamado asaí. Los brasileños elaboran un aceite de cocina gracias a las nueces de otra palmera.
Dios creó todo tipo de árboles útiles que son muy benéficos para la gente del planeta. Como cristianos, tú y yo debemos crecer, con el sustento de Dios, como las palmeras, y producir frutos de justicia para nuestros amigos y vecinos.
Pide a Dios que te ayude a producir frutos para alguien hoy mientras convives con tus amistades.