No desistas

Permanecer firme en tiempos de crisis es uno de nuestros mayores desafíos. El corazón pesa, la noche oscura parece que nunca termina, y vienen los peores pensamientos a la mente. Sin embargo, permanecer firme, creer que las cosas pueden mejorar mantener la fe en Dios exige valor, pues los "obstáculos que impiden nuestro progreso no desaparecerán nunca ante un espíritu vacilante y dudoso" (Obreros evangélicos. p. 273).

Las personas más fuertes no siempre son las que ganan, sino las que no desisten cuando pierden. ¿Recuerdas los siguientes ejemplos?

Thomas Edison era el más pequeño de la familia, y era considerado niño problemático. Su padre siempre decía que él nunca lograría nada en la vida. Sin embargo. Thomas patentó 1,093 inventos, entre ellos: el micrófono, la máquina de escribir, la ferrovía eléctrica, la lámpara eléctrica y la cámara de cine.

Nelson Mandela pasó 27 años en la cárcel por actuar como principal representante del movimiento antiapartheid. Fue liberado en 1990, recibió el premio Nobel de la Paz en 1993 y fue electo como presidente de Sudáfrica de 1994 a 1999., lo que lo convirtió en la primera persona de raza negra de la historia en asumir ese cargo en el país.

Albert Einstein tenía dificultades para hablar hasta los cuatro años, recién aprendió a leer a los siete. Su maestra lo calificó como "mentalmente lento, no sociable y siempre perdido en distracciones tontas". Lo expulsaron de la escuela y no fue admitido en la Escuela Politécnica de  Zúrich,

Ludwig Van Beethoven, compositor alemán, quedó completamente sordo a los 46 años, después de años de pérdida progresiva de la audición. Sin embargo, compuso buena parte de su obra, incluidas tres sinfonías en sus últimos años de vida.

¡No desistas! Aprende a resistir. Bertolt Brecht dijo: "Hay hombres luchan un día y son buenos [...]. Hay algunos que luchan muchos años y son muy buenos; pero hay quienes luchan toda la vida y son imprescindibles".

Como declaró Elena de White: "Nuestro santo y seña debe ser: ¡Adelante,  siempre adelante! Los ángeles de Dios irán delante de nosotros para preparamos el camino" (El evangelismo. p. 708).

¡No desistas! Enfrenta la noche con oración, pues Dios está preparado para el amanecer.