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El GPS (Sistema de Posicionamiento Global) ha sido un gran socorro para guiar a personas hasta cualquier lugar. Hoy, con las aplicaciones para smartphones, su uso se hizo aún más accesible. El sistema funciona por medio de 24 satélites. Cada uno circunda la Tierra dos veces por día, de manera que por lo menos cuatro de ellos están siempre disponibles.
Dios también se preocupó en colocar su GPS a nuestra disposición. El “equipamiento” divino tiene una precisión absoluta. Nos ayuda a encontrar el camino correcto y su señal proviene directamente desde el Trono del universo, mucho más allá de cualquier red de satélites.
La Biblia es un GPS que no yerra. Elena de White asegura: “Una frase de la Escritura tiene más valor que diez mil ideas o argumentos humanos” (Testimonios para la iglesia, t. 7, p. 71). Por su parte, Moody dice: “No fue dada para aumentar nuestro conocimiento, sino para cambiar nuestra vida”.
Sin embargo, las Biblias cerradas no transforman vidas. “No digas que Dios está en silencio si tu Biblia está cerrada”, reza una frase conocida. Además de esto, si está “empolvada es porque tu vida está quedando sucia”. ¿Estás dedicando el tiempo necesario para escuchar la voz de Dios cada día?
En tiempos en los que la familia está cada vez más desacreditada, los valores más empobrecidos y la religión más desfigurada, también necesitamos rescatar la lectura de la Biblia en familia. Sin ella, nuestros hogares están en riesgo y difícilmente transmitiremos valores espirituales a la próxima generación. Esos momentos merecen una atención especial. “La hora del culto familiar debiera ser la más feliz del día. Cuidad de que la lectura de las Escrituras sea bien escogida y sencilla; de que los niños se unan en el canto; y de que las oraciones sean cortas y directas” (Servicio cristiano, p. 259).
Acostumbro viajar mucho, pero mi familia se reúne cada día para el culto familiar, por la mañana y por la noche. En esos momentos en los que la Biblia se abre en casa, nuestra unidad se fortalece y nuestra relación con Dios se perfecciona. Así, ¡nuestro GPS está siempre conectado!
Fortalece tus momentos de estudio de la Biblia de manera individual y familiar, y puedes estar seguro de que recibirás las orientaciones correctas para llegar al destino de la vida eterna.