Beso a beso

Aunque no lo creas, los besos tienen su día. Sí, hoy es el Día Internacional del Beso y se celebra en honor al beso más largo registrado en la historia: duró 46 horas, 24 minutos y 9 segundos. Sus protagonistas fueron el matrimonio formado por Ekkachai y Laksana Tiranarat, de la ciudad de Pattaya, Tailandia.

En la Biblia se menciona el acto de besar en innumerables ocasiones. Y no siempre esta acción tiene la misma connotación y consecuencia.

• El beso de la emoción: "Y besó a todos sus hermanos, y lloró sobre ellos; y después sus hermanos hablaron con él" (Gén. 45:15). Sin duda, más allá de la traición de hacía más de una década, José se conmovió al ver a sus hermanos.
• El beso de la traición: "Entonces Jesús le dijo: Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre?" (Luc. 22:48). ¡Qué triste final para este promisorio hombre, que era discípulo de Jesús! Con ese beso, selló su futuro y el del Maestro de Galilea.
• El beso de la pasión: "¡Oh, si él me besara con besos de su boca! Porque mejores son tus amores que el vino" (Cant. 1:2). En este romántico libro, se describe al amor sano como un don maravilloso de Dios.
• El beso de la adoración: “Y vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas esta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. No me diste beso, mas esta, desde que entré, no ha cesado de besar mis pies" (Luc. 7: 44, 45). María, en un acto de desprendimiento puro, ofrendó un caro perfume y besó los pies de Jesús en señal de respeto, adoración y reconocimiento.

Pero el texto principal de hoy menciona a personas que, lejos de adorar al verdadero Dios, se fueron tras Baal y cayeron en la pagana práctica de besar al ídolo en señal de adoración.

Hoy puede ser un día histórico. Elige hoy a quién servir, a quién obedecer, a quién amar, a quién darle todo tu corazón.

"Dios tiene a muchos millares que no han doblado la rodilla ante Baal, muchos que anhelan comprender más plenamente lo que se refiere a Cristo y a la ley, muchos que esperan contra toda esperanza que Jesús vendrá pronto para acabar con el reinado del pecado y de la muerte" (Elena de White, Profetas y reyes, p. 126). PA