|
Todavía recuerdo aquella noche que nos perdimos en Roma porque Greg nos hizo subir al autobús equivocado. Bueno, yo también me subí, pero fue idea suya. Habíamos estado dando vueltas por la cuidad hasta bien pasada la medianoche, visitando la Fontana de Trevi, paseando por los parques y finalmente, caminando por la Plaza de España. Para entonces ya estábamos agotados, así que nos detuvimos en una esquina donde había un grupo de jóvenes esperando que un autobús pasara. Estuvimos allí cerca de una hora y no apareció ninguno. Pronto nos dimos cuenta de que los autobuses dejaban de pasar después de la una de la madrugada. Algunos decidieron regresar caminando, pero nosotros nos encontrábamos a varios kilómetros del hotel y el sol saldría antes de que llegáramos, así que decidimos esperar.
Finalmente un solo autobús apareció en medio de la noche y, sin preguntar a dónde nos llevaría, decidimos subirnos en él. Ahí comenzó nuestro paseo por toda Roma. Pasamos por las afueras de la cuidad y por todas las calles del centro. Entramos en una autopista y salimos de la cuidad. Los demás pasajeros fueron bajándose uno a uno hasta que solo quedamos nosotros dos. Entonces el autobús entró en un estacionamiento que estaba lleno de autobuses. El chofer apagó el motor, se bajó y se fue. ¡Nos quedamos pasmados! ¿Dónde nos encontrábamos? Y ahora, ¿cómo íbamos a regresar a nuestro hotel? Es una larga historia, pero el final es que llegamos al hotel cuando ya estaba amaneciendo. Hubiese sido mejor haber caminado hasta el hotel, pero definitivamente lo ideal hubiera sido haber hecho planes precisos desde el principio.
Muchas veces tomamos decisiones apresuradas sin pensar en las consecuencias. Parece que olvidamos que las decisiones que tomamos hoy tendrán repercusiones en nuestra vida mañana. Nuestro futuro depende de las decisiones que tomemos hoy.
¿Sobre qué bases estás edificando hoy tu vida? ¿Crees que vas a poder soportar las tormentas que la vida te va a traer o necesitas buscar un cimiento más fuerte? Prueba a construir tu vida sobre Jesús, esta es la decisión más importante de todas.
MH