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AI menos que intentes con todas tus fuerzas no parecerte a ellos, acabarás siendo igual que tus padres. Esto es lo que afirma un libro de texto y como estudiante de secundaria, te aseguro que este pensamiento infundió temor en mi corazón. ¿Quién quiere heredar los hábitos de ellos que nos sacan de quicio? ¿Quién quiere tomar las mismas decisiones y cometer los mismos errores que ellos? ¡Desde luego, yo no quería! Pero a medida que he ido creciendo, me he ido dando cuenta de que esto es alarmantemente cierto. Cuando me enojo, reacciono igual que mi padre. Cuando estoy en un apuro, mi primer instinto es decir lo mismo que solía decir mi madre. Afortunadamente, la mayoría de las veces ha resultado ser bastante bueno, porque al final me doy cuenta de que no eran tan ignorantes como yo creía. Teniendo en cuenta que hemos pasado tantísimo tiempo con ellos, se han convertido en una fuerza invisible en nuestras vidas.
El libro de Hechos también tiene una fuerza invisible detrás: el Espíritu Santo. No sabemos mucho sobre el Espíritu; es una especie de misterio. ¿Cuál es su cometido? Hechos ofrece una de las imágenes más claras de las cosas de las que es responsable esta fuerza invisible. Está detrás de casi todo lo bueno que podamos decir o hacer. Es el que proporcionó el poder para cada milagro: la fuga de Pedro de prisión, la desaparición de Felipe, el Pentecostés, las curaciones, ¡todo! También es el primero que convence al corazón de toda persona que elige a Jesús. Es la razón de los talentos y dones de cada creyente. Él nos hace sentir lo malo del pecado, nos llena de poder, nos enseña a testificar y nos envía al mundo para compartir el evangelio. Es el que nos lleva a Jesús y es la razón por la cual sentimos la necesidad de arrepentirnos. En todo lo que hacemos por y para Dios, se puede observar el poder del Espíritu. Sin él, no podríamos siquiera desear ser cristianos.
Tal vez nunca te hayas dado cuenta de lo mucho que necesitas al Espíritu Santo, pero no pasa nada, porque él está siempre disponible si se lo pides. De hecho, ya está contigo porque, si estás leyendo esto, es porque élite inspiró a hacerlo.
MH