Lo Que Tu Hijo Necesita De Ti

Hablábamos ayer de cuatro claves en la relación madre-hija; hoy hablaremos de claves para la educación de un hijo varón por parte de su madre. Según el experto Daniel Flint,* lo que un hijo varón necesita de su madre es:

> Que no sea coercitiva, que no fuerce su voluntad ni su conducta, ni sea represiva e inhibitoria. Cuando una madre quiere dirigir la conducta de su hijo varón me- diante demandas cada vez más severas y rechazando la personalidad del niño, encuentra enfrentamiento, gritos y mala conducta, que durará hasta que el niño perciba que mamá se rindió. Y entonces, se verá reforzada la conducta inicial que la madre quiso prohibir; es decir, se conseguirá lo opuesto a lo deseado. En un estudio de diez años de duración se comprobó que los varones cuyas madres eran coercitivas mostraban porcentajes más elevados de problemas de conducta y de rechazo por parte de otros niños; mientras que aquellos cuyas madres eran más adaptativas a su personalidad, mostraron habilidades sociales positivas y mejor autoestima.

> Minimizar el conflicto y maximizar el cariño. Esto no significa ser permisivas, sino manifestar un amor firme y amable a la vez, e invertir a la par de los esfuerzos del niño. Así se sentirá apoyado y libre para ser él, y tenderá a portarse bien.

> Animarlo a tomar decisiones. ¿Cómo? Educando por medio del ejemplo, y no bajo el lema "haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago". Para ayudar a tu hijo a tener autocontrol y tomar decisiones, debe darse cuenta de que confías en él, de que no intentas manipularlo, y de que la relación entre ustedes dos es estrecha.

> Evita las críticas duras, pues provocan en el niño resistencia. Las mamás que sistemáticamente usan duras palabras de crítica hacia su niño tienen mayor probabilidad de que su hijo se porte mal. Lo mismo sucede con la sobreprotección; ambos extremos son negativos de cara a la conducta del niño.

Tanto el ejemplo que una madre da como las lecciones que enseña tienen enorme impacto en sus hijos varones. Por eso, enséñeseles con cariño y sin conflicto la voluntad de Dios para sus vidas, lo maravillosamente que han sido creados, y el buen uso de la libertad para honrar al Señor, así como lo honra mamá.

«El amor de una madre no hace a su hijo dependiente y tímido, sino fuerte e independiente». Cheri Fuller.

* «The research on raising great kids», Psychology Today, octubre de 2021, pp. 46-49.