UNA CERRADURA DE SEGURIDAD PARA NIÑOS
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Los niñitos están llenos de preguntas, y mi hermanita Michelle no era diferente.
Mamá decidió contar cuántas veces Michelle decía por qué en un día. Buscó una hoja y comenzó a dejar marquitas; desafortunadamente, perdió la cuenta después de superar ampliamente varios cientos de marcas.
Los niños, por naturaleza, quieren saber más y entender más sobre el mundo que los rodea. Hacer preguntas es una parte integral de crecer. Pero, a veces, los pequeños hacen más que hacer preguntas: deciden investigar por sí mismos. Los padres, por ejemplo, les dicen: “Aléjate del horno cuando está caliente”, y “Mantén la puerta del coche cerrada hasta que paremos”. Pero ahora tenemos cerraduras de seguridad para niños en muchos dispositivos de cocina y del coche porque algunos niños simplemente no hacen caso.
Las cerraduras de seguridad para niños les permiten a los adultos abrir las puertas del horno y del coche con seguridad, pero presentan un desafío suficientemente grande para los niños pequeños que no pueden hacer lo mismo.
Sin embargo, las cerraduras de seguridad para niños no evitan que los niños aprendan. Aunque las cerraduras mantienen a los niños alejados de cosas que pueden lastimarlos, ellos pueden deambular y jugar con seguridad mientras hacen todas las preguntas que quieran. Eva no entendió este concepto. Creyó que necesitaba adquirir más sabiduría por sí misma, incluso si eso implicaba desobedecer la orden de Dios. Comió del fruto del árbol, del conocimiento del bien y del mal, y como resultado aprendió sobre el pecado y la muerte. Dios le había dicho que se mantuviera alejada porque sabía que se lastimaría. No quería verla morir. Eva podía obtener sabiduría y conocimiento por medio de la exploración y las conversaciones con él, pero Dios sabía que la desobediencia la llevaría a la ruina.
Mientras buscas conocimiento y sabiduría en este mundo alocado, recuerda usar las cerraduras de seguridad de Dios. Toma en serio las advertencias de la Biblia y mantente alejado del mal, porque Dios te ama y quiere que estés a salvo y feliz mientras aprendes y creces en él.
