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Un Pez Estrella De Cine

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«Luego Dios dijo: "Que produzca el agua toda clase de animales"». Génesis 1: 20

Jacques-Yves Cousteau fue uno de los exploradores del fondo marino más famosos del mundo. En uno de sus muchos libros, escribió sobre un insólito pez que encontró mientras buceaba desde su barco, el Calypso, en el océano Indico. El agua estaba tan transparente que los buceadores podían ver hasta sesenta metros en todas las direcciones. Había muchos peces. Cousteau escribió: «Estuvimos cuarenta días en el Arrecife de la Asunción. Una de las razones fue un pez extraordinario: un mero de 60 libras (27 kilos) al que llamamos Ulises».

El pez era enorme, y probablemente pesaba más que algunos de los que están leyendo esto, nadó hasta el fotógrafo submarinista y el buzo decidió retratarlo. El mero empujó la bolsa del flash con la nariz y el fotógrafo tuvo que retroceder para enfocar bien, pero el pez le siguió.

Parecía querer estar con los buceadores y los fotógrafos. Por ello, mientras trabajaban en el océano, a menudo tenían que esquivar a Ulises. Empezó a reunirse con los buceadores cada mañana al pie de la escalerilla del barco y ellos le recompensaban con restos de comida de la cocina del barco.

Aquella película de Ulises pasó a formar parte de la película de El mundo silencioso de Cousteau, y gente de todo el mundo aprendió más sobre Ulises, dando lugar a que otros exploradores fueran a buscarlo. Un barco que daba la vuelta al mundo hizo una escala especial en la bahía de la Asunción y envió buzos a buscar al mero domesticado. Los buceadores dijeron: «Ulises está bien, fue fácil reconocerlo porque nadó inmediatamente hacia los buceadores».

Nuestro Creador tuvo una imaginación maravillosa cuando creó a los peces del mar. ¿No te parece genial? Quizá algún día tú también salgas a bucear y veas alguna de estas maravillosas criaturas.

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