"Recuerdo cuando cantaba por las noches". Salmo 77: 6
Si vives en el campo, seguro que reconoces pronto de qué insecto se trata. Lee todas las pistas y busca la respuesta al final.
-
Hace años, la gente de China me hacía casitas porque les gustaba oír mi canción en sus casas.
-
Oigo con el codo (sí, es verdad).
-
Soy muy buen saltador, pero no puedo volar.
-
Mis antenas son muy flexibles, y me aseguro de mantenerlas limpias. Me gusta especialmente comer frutas dulces y jugosas, como los melones.
-
Froto mis alas y hago música. Es algo parecido a lo que hacen un violín y un arco.
-
Mi cubierta es tan brillante y negra como unos zapatos de charol.
-
Pongo mis huevos en el suelo para mantenerlos a salvo durante el invierno. Suele escucharse mi canto en las tardes de verano y otoño.
Respuesta: Soy un grillo. Para algunas personas, mi canción es una molestia porque canto cuando intentan dormir. Pero para la mayoría de los demás grillos, mi canto es música dulce. La gente no entiende por qué hago lo que hago.
Si eres cristiano, puede que en ocasiones los demás no entiendan por qué haces algunas de las cosas que haces. Cuando eso suceda, sé como el grillo. Sigue haciendo de tu vida un dulce canto para Jesús.
Vicki.