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Músculos Poderosos

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«No es la fuerza del caballo ni los músculos del hombre lo que más agrada al Señor» Salmos 147: 10

SANSÓN FUE EL HOMBRE QUE TUVO LOS MÚSCULOS MÁS FUERTES. ¿Puedes imaginar lo grande que eran sus bíceps, los músculos de sus brazos?

Antiguamente, las ciudades eran protegidas de enemigos, con puertas muy altas y grandes, para que nadie pudiera derribarlas. Un día Sansón quiso salir de Gaza, pero sus puertas habían sido cerradas para atraparlo a él. Entonces, con sus manos, arrancó las puertas junto con sus pilares, las puso en su espalda, caminó y posteriormente, las tiró en la cumbre de un monte.

Dios le dio fuerza a Sansón, sin embargo, no eran sus músculos lo que más agradaba a Dios, sino la obediencia y el uso correcto de ese talento. Dios desea que tú seas obediente y utilices los talentos que te da para su servicio.

Actividad: Con ayuda de mami dibuja, colorea, recorta y, coloca los bíceps, en el lugar correspondiente de la silueta de cartón.

Oración: Querido Padre, ayúdame a utilizar mis talentos para ti.

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