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EL SENTIDO DEL TACTO nos permite sentir diversas sensaciones:
1. Sensaciones placenteras, son las que nos gustan, como las cosquillas, las caricias, los abrazos.
2. Sensaciones dolorosas: son las que no nos gustan, como los golpes, los raspones, las cortadas, el clima muy frío o muy caliente.
3. Sensaciones indiferentes: son aquellas que tu piel no les presta atención, pues no producen placer ni dolor, lo que hace que el cerebro las ignore.
Dios desea que utilices tu tacto no solo para percibir las sensaciones, sino también, para sentir su presencia en cada paso de tu vida. Solo así podrás sentir alegría y felicidad en cada acción que realices, pues tu padre amante, Dios, estará a tu lado.
Actividad: Juega con tu familia a las cosquillas. Al terminar, tomen tiempo para darse un abrazo.
Oración: Querido Padre, gracias por las sensaciones. Deseo sentir tu presencia agradable siempre a mi lado.