La verdadera grandeza

Imagina a Laquisha, una chica de tu escuela que es súper amable. Aunque en clase y en los deportes todos quieren ser los números uno, Laquisha siempre ayuda a sus amigos y nunca busca llamar la atención solo para ella. Por ser así, todos la respetan mucho, y siempre encuentran formas de hacer proyectos divertidos juntos.

Piensa en esto: ser humilde no significa que eres menos fuerte, sino que sabes usar tu fuerza para ayudar y no para presumir. Si eres humilde, significa que sabes que no lo sabes todo y que lo que tus amigos hacen también es importante. Así como en los videojuegos se sube de nivel, con la humildad puedes aprender mucho más.

La humildad es como tener un superpoder para hacer el bien. Buscas formas de ayudar a tus amigos y de ponerlos primero, antes que a ti. Ser humilde es ser grande de verdad, como cuando en los dibujos animados un héroe ayuda sin que nadie sepa. . Cuando juegas y compartes, a veces hay que decir "lo siento" 0 "está bien" cuando algo no sale como queremos. Ser humilde también te ayuda a pedir disculpas cuando es necesario y a aceptar decisiones que no te gustan mucho; y es como un escudo mágico que te protege de las peleas.

Recuerda que ser el más genial o tener las mejores cosas no te hace grande. Lo que de verdad cuenta es cómo tratas a los demás y el cariño que compartes. Los jóvenes humildes son como los héroes secretos que dejan huellas de amabilidad en el mundo. Así que, aunque a veces parezca que todos quieren ser los más populares, tú puedes elegir ser humilde. Valorando a tus amigos, ayudando sin esperar nada a cambio, siendo amable, vas a descubrir que lo más admirable es ser buena persona. Que tu aventura de ser humilde te haga tener muchos amigos y una vida llena de cosas buenas.

Oración: Querido Dios, ayúdame a reconocer mis limitaciones, a servir a los demás con gracia y a perdonar como he sido perdonado.