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Una entrega completa

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Por la fe, Abrahán obedeció cuando fue llamado, y salió sin saber a dónde iba, y se dirigió al lugar que iba a recibir como herencia (Hebreos 11: 8).

JUAN JOSÉ TENÍA UNA FAMILIA PRECIOSA, compuesta por su esposa y tres hijos. Su esposa e hijos habían conocido al Señor y se habían entregado completamente varios años antes de que yo llegara a esa iglesia, pero Juan José parecía mirar la conversión de ellos desde una tribuna. La familia había cambiado para bien y él como padre había sido testigo de ello, pero a la hora de tomar compromisos serios con Jesús, su trabajo estaba antes que Dios. El negocio familiar de la panadería parecía tener lazos y redes que no le permitían alinear su vida con los requerimientos que las Escrituras dan para los hijos de Dios. Uno de sus hijos, hablándome sobre su padre me expresó: «No puede dejar todo por Jesús. Es un buen padre, un hombre honrado y una buena persona, pero guardar el sábado tiene para él un precio demasiado caro que no está dispuesto a pagar».

En tu caso, ¿estás completamente comprometido con Jesús? ¿Has dejado todo hábito y tendencia pecaminosa para que tu vida se ajuste a los parámetros bíblicos de un cristiano? ¿Existe alguna atadura, que no estás dispuesto a entregar, y que te impide darle a Dios el primer lugar?

«Con frecuencia oímos decir que Dios quiere nuestro tiempo, talentos y dinero. Eso no es necesariamente cierto. Si le damos todo eso a Dios y pensamos que le estamos haciendo un favor, nos engañamos. Lo que Dios dice de verdad es: "¡Te quiero a ti! Y si te tengo, poseo todo lo que tienes". En estos últimos días, Dios no se tranzará por menos que por un compromiso total. Es necesario preguntarnos: ¿Me he dado totalmente a Dios sin ninguna reserva? ¿Me he puesto a su disposición? Eso es compromiso» (Derek Prince, Enfrente el futuro sin temor, p. 128).

Abraham, el padre de la fe, es un ejemplo bíblico que transmite hasta nuestros días qué significa comprometerse totalmente con Dios. Dejando las comodidades de su casa y su cuidad, cantidad de familiares y amigos, se embarcó para ir a la tierra que Dios le mostraría. Su vida y sus decisiones son un modelo extraordinario en establecer un orden de prioridades de acuerdo a los requerimientos divinos. Abraham supo lo que Dios deseaba para su vida y se propuso llevarlo a cabo, aunque eso involucrara abandonar algo.

Comienza este día comprometiéndote completamente a Jesús y díselo en oración para que su poder te ayude a abandonar cualquier obstáculo.

Ejemplos y enseñanzas de los patriarcas.

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