Vivir por la Palabra
|
HABÍA VISITADO A UN MATRIMONIO JOVEN DE LA IGLESIA, y al término de la | visita, uno de ellos me pidió que visitáramos a uno de sus amigos que desde hacía varios meses había dejado de asistir a la iglesia por «ideologías nuevas que aparecen en internet y que atacan la doctrina adventista». Fuimos juntos a verlo, al llegar a su hogar, rápidamente salió el tema en cuestión y comenzaron las preguntas que parecían insinuar que los adventistas estábamos conspirando para engañar a la gente. Después de escucharlo pacientemente le pregunté: «Hermano, ¿has leído por tu propia cuenta la Palabra de Dios?». Se hizo un silencio...
El enemigo de Dios busca la ruina de todos los seres humanos, y para esto hace esfuerzos decididos para confundir, engañar y apartar de la fe a los incautos. En esta batalla milenaria entre el bien y el mal, Satanás puede distorsionar las Escrituras y utilizar a hombres que están genuinamente convencidos de su error, para llevar a otros a la perdición. El adventismo no ha quedado afuera de esta lucha y de manera sistemática han aparecido publicaciones y estudios que intentan apartarnos de las claras enseñanzas de la Biblia. A través de un libro que debería ser de lectura obligatoria para todos los adventistas, el pastor Samuel Koranteng-Pipim señala: «La corriente principal del adventismo está atrapada en el fuego cruzado de los ataques de la izquierda liberal, que opera dentro de la estructura de la iglesia, y la derecha independiente, que opera desde afuera estableciendo organizaciones y estructuras propias» (Recibiendo la Palabra, p. 367).
¿Qué debemos hacer para discernir los engaños que intentan apartarnos de nuestra fe? ¿Cómo podemos eludir la artillería pesada que usa el enemigo para confundirnos y llevarnos a la ruina espiritual? «Vivir por la Palabra es el único medio por el cual podemos hacer frente a los engaños satánicos de los últimos días» (Ibíd). Dios, en su grandiosa sabiduría, siempre procuro proteger a su pueblo e instruirlo en el mensaje de salvación. Ya temprano en la historia humana, a través de Moisés, el Señor aconsejó: «Pondréis estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra alma, y las ataréis como señal en vuestra mano, y serán por frontales entre vuestros ojos» (Deuteronomio 11: 18, RV1995).
No importa lo que leas en internet; no interesa lo que escuches de otros; nada importa lo que leas en revistas y publicaciones: si vives por la Palabra, tendrás una guía segura para tu vida espiritual.
Ejemplos y enseñanzas de grandes líderes.
