Regresar

El gran pez

Play/Pause Stop
Tu Biblia dice: «[...] el Señor había dispuesto un enorme pez para que se tragara a Jonás». Jonás 1: 17

HOY HABLAREMOS DE UN ENORME PEZ, que mide aproximadamente 12 m de largo. ¡El tiburón ballena! ¿Sabías que es el más grande en todo el planeta? Aunque tiene muchos dientes, son tan pequeños que no pueden masticar su alimento, pero ¡puede tragar a una foca nadando! Es inofensivo; sube a la superficie con la boca hacia arriba para que le rasquen la pancita. Se ha visto a los buzos nadando y jugando con algunos.

Este pez me recuerda la historia de Jonás. Dios le dijo que fuera a predicar a Nínive, porque destruiría esa ciudad. Jonás tuvo mucho miedo, pues los ninivitas eran muy malos. Así que trató de irse a un lugar donde Dios no lo encontrara. Pero ¡no nos podemos esconder de él! Jonás se fue en otra dirección y, cuando iba en el barco, comenzó una gran tormenta que parecía que los haría naufragar. La tripulación tiró sus cosas y clamó a sus dioses para que los librara de la tempestad.

Por fin Jonás confesó su culpa y pidió que lo echaran al mar. Al hacerlo, el mar se calmó. Dios envió un gran pez para que lo tragara. La Biblia no dice qué clase de pez era, pero dentro de él Jonás pasó tres días orando. Dios ordenó al pez que lo vomitara en la playa. Jonás predicó y los ninivitas se salvaron.

Amiguito, Dios siempre sabe lo que es mejor para nosotros. Haz siempre su voluntad.

Oremos: «Querido Jesús, deseo obedecerte siempre, aunque eso sea difícil. Amén».

Matutina para Android