¿Ovejita o cabrita? - Parte 2

LAS OVEJITAS SON DIFERENTES a las cabritas, aunque las puedes confundir a primera vista. Las cabritas son fuertes, robustas, con patas cortas; no les gusta que las cuiden, caminan sin rumbo descubriendo lugares, saltan, se alejan del pastor. Su carácter es independiente.

Por su misma forma de ser, Jesús las comparó con un tipo de personas. Cuando él venga por segunda vez, pondrá a las ovejitas a su derecha y a las cabritas a la izquierda. A las ovejitas las recibirá, porque hicieron actos de amor verdadero y de misericordia hacia personas que necesitaban alimento, vestido, techo o una visita en hospitales, cárceles o en algún otro lugar. Sin embargo, a las cabritas las rechazará porque, aunque hicieron los mismos actos de bondad, su intención no fue de amor verdadero.

Los dos grupos le preguntarán a Jesús cuándo hicieron esos actos hacia él. Jesús responderá que, al hacerlos hacia las personas necesitadas, fue como si a él se los hubieran hecho.

¿Tú qué quieres ser: ovejita o cabrita? Las ovejitas se dejan guiar por el buen pastor, que es Jesús; disfrutan estar con él, son dependientes de él y como resultado viven una vida de amor, sirviendo a los necesitados.

Recuerda siempre que eres una ovejita de Jesús.

Oremos: «Querido Jesús, deseo ser una ovejita de tu rebaño y ayudar a los necesitados. Amén».