Regresar

SET

Play/Pause Stop
«Adán volvió a unirse con su esposa, y ella tuvo un hijo al que llamó Set, pues dijo: "Dios me ha dado otro Hijo en lugar de Abel, al que Caín mató; » (Génesis 4: 25).

Claramente, Satanás quería tener el control de toda la humanidad, con la muerte de Abel parecía que los planes de Dios no iban a prosperar, pero Dios permitió que la primera pareja tuviera otro hijo al que llamaron Set. Él ocupó el lugar de Abel. Cuando Set cumplió ciento cinco años se convirtió en padre de Enós. El nacimiento de su hijo impulsó a Set a buscar a Dios como nunca antes y su ejemplo ejerció una influencia positiva en muchos, por eso la Biblia dice: «Desde entonces se comenzó a invocar el nombre del Señor» (Génesis 4: 26). Esto significa que hubo un nuevo interés por orar, obedecer y adorar a Dios. Ese fue el primer reavivamiento en la historia de la humanidad, algo que no ocurría desde los días de Abel. Ahora hubo un nuevo interés por seguir la voluntad divina.

Así que mientras los cainitas se vanagloriaban en su fuerza, sus armas, su música y fundaban ciudades poniéndoles el nombre de alguno de ellos, los setitas se distinguían por dar gloria a Dios. Desde ese momento la humanidad se dividió en dos bandos: los hijos de Caín caracterizados por el pecado y los hijos de Set que se distinguían por su lealtad a Dios. Por lo tanto, desde el principio y hasta que Cristo vuelva por segunda vez, Dios ve dos grupos. Es claro que para Dios no hay puntos medios ni zonas grises, para el no existe la neutralidad, ni la tibieza. Solo hay dos opciones; o somos de él, o no lo somos.

Cuando Jesucristo desarrolló su ministerio en esta tierra siempre concluyó sus enseñanzas con dos alternativas: luz o tinieblas, camino ancho o angosto, trigo o cizaña, ovejas o cabritos, la roca o la arena, estar a su derecha o a su izquierda... En última instancia, la enseñanza es que el destino de la humanidad se limita a dos alternativas: vida eterna o muerte eterna.

Esta diferencia que existía desde Génesis 4 es real hoy. Así que, vive como un hijo de Dios dondequiera que estés. Distínguete por amar, servir y adorar a Dios tal como lo espera de sus fieles hijos.

Matutina para Android