Regresar

MIRA LO INVISIBLE

Play/Pause Stop
«Y oró Eliseo al Señor, diciendo: "Te ruego, Señor, que abras sus ojos, para que vea". El Señor abrió entonces los ojos del criado, y este vio que la montaña estaba llena de caballería y de carros de fuego alrededor de Eliseo» (2 Reyes 6:17).

¿TE GUSTARÍA PROBAR EL EFECTO DE la ilusión óptica?

Recorta un círculo, dibuja una araña en un lado y una tela de araña en el otro. Con un alfiler, haz dos pares de agujeros verticales en los lados del círculo y pasa un trozo de cuerda fina o hilo por cada par. Sostén las cuerdas (o el hilo) con cada mano y gira el círculo, de forma que las cuerdas se enrosquen entre sí. A continuación, tira de cada par de cuerdas con ambas manos, desenroscándolas rápidamente. Al hacer esto, verás una imagen tras otra en rápida sucesión, dando la falsa impresión de que la araña está en la tela.

Desde la entrada del pecado, nuestro mundo se ha convertido en un mundo de ilusiones. Satanás distorsiona los hechos y nos atemoriza con la idea de que estamos solos y desamparados. La única manera de ver lo que está ante nuestros ojos es entregar nuestros sentidos a Dios y pedirle que nos revele la verdad.

¿Quieres ver un ejemplo de esto? Eliseo y el joven que lo acompañaba estaban rodeados por el ejército enemigo. El joven estaba aterrado al ver a aquellos poderosos adversarios, pero Eliseo oró a Dios y le pidió que abriera los ojos del joven. Fue entonces cuando el joven pudo ver el ejército de ángeles que los protegía.

En medio de los problemas de la vida, podemos pensar que no hay solución. En ese momento, necesitamos recordar que nuestros sentidos pueden ser engañados y que la mejor manera de ver lo que nos rodea es con los ojos cerrados en oración.

DIOS TODO LO SABE, TODO LO PUEDE, TODO LO VE; así que confíale tu vida; pídele que te guíe cuando te enfrentes a incertidumbres y que abra tus ojos para ver su amor y amparo a cada instante.

¿Recuerdas el compromiso? Vuelve al texto del día 5.

Matutina para Android