«Si [...] habitara en los límites del mar occidental, aún allí me alcanzaría tu mano». Salmo 139: 9, 10
Hoy vamos a conocer algunos lugares curiosos de nuestro planeta. ¿Estás preparado?
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La explosión volcánica más potente de los tiempos modernos destruyó la isla de Krakatoa el 27 de agosto de 1883. La explosión se oyó a más de 3.500 kilómetros de distancia, en Australia, y provocó olas de hasta 30 metros. La ceniza creada por la erupción afectó a la atmósfera de todo el mundo, provocando puestas de sol brillantes y hermosas durante más de un año.
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Uno de los lugares más asombrosos de Norteamérica es el Gran Cañón. Tiene 446 kilómetros de largo, 24 kilómetros de ancho en algunos lugares y hasta un kilómetro y medio de profundidad, es un agujero enorme. Los bosques crecen hacia la parte superior del cañón, mientras que las elevaciones más bajas son desérticas. En el parque crecen más de 1.500 plantas diferentes y hay 355 tipos distintos de aves. Puedes encontrar 89 mamíferos diferentes en el Gran Cañón y 47 tipos de reptiles. Podrías pasarte años allí y aun así no ver todas las cosas fascinantes que Jesús ha puesto allí.
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La cueva más grande del mundo es Mammoth Cave, en Kentucky, Estados Unidos. Hasta ahora se han explorado más de 564 kilómetros de sus pasadizos, y los cartógrafos de cuevas creen que tiene unos 900 kilómetros de largo. La segunda cueva más grande del mundo se encuentra en la parte ucraniana de la antigua Unión Soviética, con 191 kilómetros de longitud. ¿Y la tercera cueva más grande? También está en Kentucky.
Puede que no vivas cerca del Gran Cañón o de la cueva más grande del mundo, pero seguro que hay cosas interesantes cerca de donde vives. ¿Qué le enseñarías a alguien que viniera a visitar tu ciudad?
Piensa en las cosas fascinantes que Jesús ha creado en este mundo. Si nuestro planeta es así de emocionante, aun estando dañado por el pecado, trata de imaginar lo que encontraremos en el cielo y en la Tierra Nueva.
Vicki.